RUS Asunción. Visite Playa Montevideo, PY

Contexto. Asunción

Asunción es hermosa
Paraguay ha pasado un difícil siglo XX, precedido por una guerra que destruyó el país en 1870 –la guerra de la Triple Alianza–, casi seguida con otra guerra –la de El Chaco– contra Bolivia en los años 30 y una sangrienta y represiva dictadura militar cuyos herederos han gobernando el país hasta el siglo XXI. Todo ello convierte a Asunción, la capital, en un lugar remoto y aislado de sus países vecinos. Sin embargo, es una de las capitales más «tropicales» del cono sur y la única no andina que tiene una masiva presencia indígena –en este caso guaraní–. Pese a cierta imagen de insegura, paraíso de contrabando, e incluso de ciudad fea, Asunción esconde una belleza extraña.

Rodeada por el enorme río Paraguay –uno de los mayores ríos del mundo–, en el punto en el que confluye con el río Pilcomayo, Asunción vive sin embargo de espaldas al agua y a su hermosa bahía. En los lugares donde el río linda con la ciudad, los más degradados del centro urbano, se generan unos puntos semiabandonados que son todo un ejemplo de «espacio público basura». Esos puntos en los que la ciudad se asoma al río son bellísimos, especialmente al atardecer, tal y como nos hicieron ver los colaboradores del proyecto, todos ellos enamorados de su ciudad y de su país.

Uno de esos puntos es la Playa de Montevideo, un lugar de muy fácil acceso, apenas a quinientos metros del centro neurálgico de la ciudad entre el puerto principal de la ciudad y la gran favela que existe a los pies del palacio presidencial. Un lugar semiabandonado, inseguro y a la vez hermosísimo. Una suerte de «balcón fluvial» que hoy en día se usa exclusivamente para tomar el barco-taxi que cruza el río y cargar los pocos barcos que lo remontan hasta Concepción y el Pantanal.

Los mejores espacios de la ciudad son precisamente los que no se usan, siendo los malls y los barrios residenciales, incluso más anodinos y anómicos de lo habitual, los espacios estrella de la ciudad.

En Asunción apenas hay recolectores informales, y los recicladores se sitúan mayoritariamente en el vertedero. Cuando llegamos a Asunción, la situación en el vertedero revestía graves problemas para los propios recicladores, debido a la organización mafiosa generada en torno al negocio del reciclado de basura en el vertedero, lo que desaconsejaba seriamente encaminar el proyecto en esa dirección.

Proyecto. Visite Playa Montevideo, PY

RUS Asunción, enmarcado dentro de la Gira Mercorus, consistió en una intervención lúdica y paisajística en el espacio de puerto degradado y semi-informal llamado Playa Montevideo. Entramos en contacto con el Laboratorio de Arquitectura, quienes estaban desarrollando interesantes trabajos de reutilización de materiales a gran escala y nos asociamos con ellos para llevar a cabo la intervención.

En los muelles abandonados del puerto se colocaron unas piezas de mega-mobiliario urbano diseñado a partir de las cúpulas de palés como las que Sonia Carísimo y Panchi Tomboly, arquitectos colaboradores del Laboratorio de Arquitectura, venían empleando en proyectos sociales. Estas mini-cúpulas se convirtieron en una especie de «tuercas habitables»: unas estructuras geométricas, recombinables y con el suficiente peso y resistencia para funcionar como mobiliario urbano. El proceso de construcción, en el propio lugar, y realizado por un grupo de jóvenes estudiantes de arquitectura, resultó también importante para la pequeña comunidad de usuarios habituales del espacio, que pasaron de la sorpresa inicial a la apropiación inmediata de los mismos. Las «tuercas» tuvieron varias formas y posiciones, así como adiciones y reutilizaciones de sí mismas, tanto por parte del equipo del proyecto como por parte de los vecinos de la zona.

Utilizamos la gráfica popular para difundir el espacio en el resto de la ciudad, pues el objetivo último del proyecto era el redescubrimiento de la propia Asunción. Anunciar la playa con la idea de que ésta pudiera ser asumida como una intervención anónima, popular, pública, apropiable, y no un parque de esculturas o una intervención «artística». Se instalaron los típicos «pasacalles» -una lona instalada en la calle a modo de pancarta- y mural gráfico como los que llenan muchas paredes de Asunción.

Paralelamente también se ideó y se construyó un «juego de armar» gigante a partir de un material reciclado que estaba desarrollando Pedro Padrós, inventor catalán afincado en Paraguay desde hace décadas: El Armarplax, un material hecho de plástico reciclado tramado con fibras vegetales que puede servir para realizar toda clase de superficies. Para el proyecto RUS, reutilizamos este material para construir un juego urbano. Diseñamos unas piezas de 40 x 20 cm y de 20 x 20 cm, flexibles pero resistentes, que permitían construir estructuras con una gran libertad. Las cuales se utilizaron junto a las «tuercas» en Playa Montevideo y otros lugares.

MATERIALES
Palés y tapones de plástico de botellas.

FECHAS
Ejecución: 16-26 abril de 2009.
Producción: 2-16 abril de 2009.
Viaje previo: noviembre de 2008.

COLABORADORES LOCALES
Tombolycarisimo arquitectura
Estudio de arquitectura "Menos es igual a más por menos (-=+x-)".
Pedro Padrós
Proyecto Ecoplax.
OTROS
Laboratorio de Arquitectura
Colaboradores: Pedro Briend, Santiago Ariel Sosa, Pablo Bressan, Álvaro di Bernardo, Mauricio Ortiz.
Sol Quiñónez, Soledad Patiño
Estudiantes de la Universidad Nacional de Asunción.
Fernando Szmuc Gertopán
Gestor cultural, inspirador del proyecto.

ACTIVIDADES
Instalación en el espacio "Playa Montevideo".
Diseño y fabricación del juego de armar "Armaplax".

Web de RUS Asunción. Visite Playa Montevideo, PY
»

Comments RSS feed for this post.

Leave a comment