Exposición en Fundación Cristina Enea. San Sebastián-Donostia.
22 septiembre – 11 diciembre 2022
En esta exposición, mediante proyectos audiovisuales y de autoconstrucción con desechos, intentamos subvertir momentáneamente, o al menos explicar, la implacable máquina de producción, consumo y desecho para sugerir que podemos pensar en los materiales y objetos que nos rodean de otra forma, que, como nos anuncian recicladores y chatarreros, la basura no existe.
Cuando no sabemos qué hacer con lo que compramos, porque ya no lo queremos o no lo necesitamos, lo convertimos mágicamente en basura. Se transforma en esa cosa fluida que se acumula finalmente en los vertederos, donde no nos molesta y ni podemos verla ni olerla. Este proceso lineal de degradación planificada define la actual sociedad de consumo y desecho en la que vivimos. Muchas veces no hace falta que se produzca esta degradación, porque lo que se produce es ya directamente basura.
En los vertederos o incineradoras se quema o se acumula lo que no somos capaces de reciclar a la velocidad con la que lo producimos. El reciclaje se ha presentado como la solución al despilfarro: consume ahora que luego será reciclado. Es de hecho un proceso fundamental para alargar la vida de los materiales, sin embargo, no es capaz por sí solo de solventar los problemas generados por la excesiva generación de residuos. Junto con la incineración, que también hace “desaparecer” mágicamente los desechos, se usa para que consumamos sin valorar el verdadero impacto de nuestras acciones.
La exposición se divide en dos partes:
- Proyectos de autoconstrucción con desecho. Un repaso a los proyectos de auto-coles y auto-parques de los últimos años a través de fotos, vídeos y dos instalaciones hechas específicamente para el espacio expositivo con materiales de desecho de Donostia.
- Proyectos audiovisuales (video-instalaciones) sobre la sociedad del consumo y desecho, con un mirada sobre los lugares donde se acumula.
Las cartelas de esta exposición han sido impresas con láser sobre cartón recogido en las calles de Bilbao. Impresión láser por Kealab.
Instalaciones
Se construyeron dos instalaciones
Isla de neumáticos
Construcción con neumáticos desechados del Garbigune de Garbera durante el montaje de la exposición.
Materiales: neumáticos de coche, moto y furgoneta de medidas variables, tornillos y tuercas de métrica 8 mm largos variables.
Herramientas: estropajo, bayeta y jabón para limpiar los neumáticos, taladros, broca de 8mm y llaves fijas de 13 mm.
Telaraña de estacas
Este juego ha sido construido con las estacas de madera desechadas del vivero municipal de Putzueta.
Materiales: estacas de madera de 6 y 8 cm de diámetro, tornillos tirafondos de 10-12 cm y goma de cámara de bici para apoyar.
Herramientas: sierra de calar, taladro-atornillador y amoladora para pulir aristas.
Auto-coles, Auto-parques y los troncos de Filomena
Auto-coles y Auto-parques son las líneas de trabajo de proyectos de autoconstrucción con colegios y comunidades locales. Reutilizando materiales de desecho de las propias organizaciones se transforman colectivamente patios y entornos para hacerlos más amigables y jugables, donde el co-diseño y la autoconstrucción son parte fundamental. En este proceso colectivo de reutilización de materiales y espacios, mayores y pequeños pierden el miedo a usar herramientas y construir con sus propias manos sus propios entornos. Y todo ello cumpliendo la normativa europea de juego.
Auto-coles
A lo largo de las últimas décadas, los patios de colegio han ido viendo mermadas sus funciones y su disfrute. Los recortes en mantenimiento han conducido a que sea más recomendable deshacerse de un juego que repararlo, las zonas verdes reducidas a su mínima expresión y la revisión de la noción de “riesgo” ha conducido a que algunos juegos sean realmente poco divertidos. Sin embargo, en los últimos tiempos existe interés en la comunidad educativa por retomar los patios de colegio como lugares educativos, más diversos y de contacto con la naturaleza.
En total se han intervenido en este programa, desde el 2013 hasta la fecha, patios de 37 centros educativos. 7 escuelas infantiles, 21 colegios de primaria y 8 institutos de secundaria. 31 centros públicos, 3 centros concertados y 3 privados.
- Codiseño
Es importante que la intervención en el patio no sea entendida como una imposición de unos pocos al resto, por lo que es importante hacer un diseño de forma colectiva. Para ello, es necesario convocar sesiones de trabajo donde se decida colectivamente qué se va a hacer y cuándo se puede hacer.
- Colaboración y creación de comunidad
A lo largo de los procesos de modificación espacial, las personas implicadas tejen relaciones intensas cuando trabajan con sus manos, lo que hacen que esa comunidad se fortalezca, y por otro lado, vaya creciendo, ya que tiene que trabajar con agentes muy diversos que les garanticen viabilidad de las actividades que lleven a cabo como seguridad, mantenimiento o limpieza.
- Autoconstrucción
La herramienta más peligrosa es la que no se sabe usar (esto va para profesorado y madres/padres). La participación no se queda en el codiseño, si no que forma parte de la construcción física de los nuevos equipamientos. Hemos trabajado con las siguientes herramientas: sierras de corte de madera, amoladora, lijadoras, martillo percutor, hormigonera, soldadora de hilo MIGMAG, pulidora, taladros, picos y palas. Las tareas han sido muy diversas, y en todas ha participado el alumnado por grupos: soldar, lijar hierro y madera, cortar, hacer hormigón, excavar, pintar, lijar y pulir.
- Usamos materiales de desecho
Para que el proyecto sea viable económicamente e interesante pedagógicamente es imprescindible poder reutilizar materiales que se tengan a mano, es decir, localizar materiales y recursos disponibles en el entorno. Lo que se llama ahora economía circular. Los materiales más comúnmente reutilizados han sido: neumáticos, pizarras, pupitres viejos, tubos de obra, bidones, vallas y palets.
- Certificar no es difícil
Una de las principales pegas que se le ponen a la reutilización es la dificultad de homologar y certificar lo construido, es decir, que cumpla la Normativa Europea UNE-EN 1176. Pero en realidad se puede hacer de manera sencilla, hay que cumplir cosas muy básicas.
Certificar nos permite, por un lado, legitimar otro tipo de trabajo (entre lo formal y lo informal), frente a grandes empresas del sector que tienen actualmente el negocio de la homologación. Y por otro lado, y más importante, nos permite dar seguridad y confianza a los centros educativos donde trabajamos. Sentirse amparados frente a cualquier incidente en su uso (reclamación y quejas de los padres principalmente). Ver hilo de Twitter sobre certificación.
Auto-coles es un proyecto en colaboración con el arquitecto, mediador y constructor, Nacho Bertola (NABE).
En esta exposición se muestran imágenes de: Ideo Escuela (Madrid), CEIP Miguel Delibes (Madrid), CEIP Valle Inclán (Madrid), IES Gómez Moreno (Madrid), CEIPSO Andrés Manjón* (Fuenlabrada), CEIPSO Cervantes* (Alcorcón), CEIPSO Maestro Rodrigo (Aranjuez, financiado por Renault), CEIP Francisco de Quevedo* (Leganés, financiado por Fundación Montemadrid), CEIP Cristóbal Colón* (Madrid), CEIP Aravaca* (Madrid), CEIP Jose María Pereda (Madrid), CEIP Puerto Rico (Madrid), CEIP República de Chile (Madrid), CEIP San Benito (Madrid), IES Menendez Pelayo (Getafe, financiado por Fundación Daniel&Nina Carasso).
*En colaboración directa con el arquitecto experto en construcción participativa, Ignacio Bertola. Muchos de los centros públicos pertenecen al programa «Educar Hoy por un Madrid más sostenible del Ayuntamiento de Madrid».
Auto-parques
Autoparque es un proyecto de equipación y construcción colectiva de infraestructuras lúdicas a partir de material recuperado. Auto de autoconstrucción y parque como lugar de encuentro y aprendizaje.
Se trata de construir mobiliario público o mejorar el ya existente, en zonas degradadas de la ciudad para recuperar su uso y favorecer la creación de espacios de ocio y encuentro. Lo importante no es sólo el fin sino el cómo, pues se propone hacerlo de manera colectiva, de modo que los participantes adquieran autonomía para poder replicar técnicas en el futuro.
En esta exposición se muestran imágenes de:
Troncos de Filomena
“Hay una oportunidad increíble para realizar un proyecto a escala urbana muy fácil y directo: reutilizar los troncos de los árboles abatidos por Filomena por toda la ciudad para estructuras de juego naturales en escuelas infantiles y colegios” (tuit del 4 de febrero de 2021 de @basurama).
La tormenta Filomena en enero de 2021 destruyó muchos árboles de la ciudad de Madrid. Basurama propuso y llevó a cabo con las comunidades educativas una serie de intervenciones para intentar que los árboles y ramas caídos fueran aprovechados para construir equipamientos de estancia y juego en vez de triturados.
En esta exposición se muestran imágenes de: EI Los Ángeles (Madrid), CEIP Valle Inclán (Madrid), IES Menendez Pelayo (Getafe, financiado por Fundación Daniel&Nina Carasso), CEIP Jose María Pereda (Madrid), CEIP República de Chile (Madrid), CEIP Francisco de Quevedo (Leganés, financiado por Fundación Montemadrid) y IES Valdebernardo (Madrid).
Vida y muerte de vertederos #
Exploramoslos lugares donde se han acumulado, se acumulan o se queman los residuos en Euskadi -vertederos cerrados (y en activo) e incineradoras a través de fotografías y otros documentos.
Imágenes de Google Maps/Google Earth procedentes de CNES/Airbus, European Space Imaging, Eusko Jaraurlaritza – Gobierno Vasco, Maxar Technologies, Instituto Geográfico Nacional de España, Data SIO, NOAA, US Navy, NGA, GEBCO, Landsat / Copernicus, Gobierno de Navarra, IBCAO.
Este mapa señala los lugares de las fotografías superpuesto a los suelos que soportan o han soportado actividades o instalaciones potencialmente contaminantes del suelo y han sido clasificados como vertederos según los datos del Departamento de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno Vasco.
Ver en pantalla completa.
Panteón de vertederos
En esta sección se muestran las lápidas de 3 vertederos: la vida y muerte de 3 vertederos a través de diferente documentación fruto de una investigación en marcha. El primero es el vertedero de Petritegi (1958-1993), en Astigarraga. El archivo municipal de Donostia da acceso a la justificación para comprar esos terrenos e instalarlo en ese lugar.
El segundo es más reciente, se trata del vertedero San Markos (1971-2014). A través de cuatro documentos mostramos el ciclo de vida de un vertedero: Acto primero, Creación del vertedero; Acto segundo, con manifestaciones y artículos críticos (2006); Acto tercero: la formación de una asociación vecinal en contra; Acto cuarto, el cierre (2013) a través del anuncio de contratación de las obras publicado en el BOE.
El último de esta serie es el vertedero de Zaldibar (2011-2022), se muestra a través de un díptico que lleva por nombre “A las cuatro de la tarde del 6 de febrero del año 2020 un vertedero se derrumbó, invadiendo la autopista A-8 a su paso por Zaldibar, sepultando a dos de sus trabajadores”. La instalación deja sin relatar todo lo que pasó después y lo que se ha descubierto sobre el vertedero y que ha puesto de manifiesto las irregularidades en los sistemas de gestión de residuos en Euskadi.
Por sus basuras les conoceréis.
(A) Vertedero de Petritegi (1958-1993)
El servicio de recogida de basuras, se viene realizando por el ayuntamiento desde hace muchos años. A partir del año 1936, debido a la escasez de medios derivados de la guerra civil y la segunda guerra mundial, el servicio de recogida tuvo que improvisarse con los medios disponibles por el contratista Sr. Martínez Elizondo; Carros de caballos, sencillos carros de bueyes etc. Las basuras que así se recogían eran llevadas a los basureros municipales de Ergobia e Igara y a otro establecido por el contratista en las proximidades de Ayete. Cerca de los basureros de Ergobia e Igara se empezaron a realizar bastantes edificaciones las cuales motivaban frecuentes quejas de los vecinos por los fuertes olores, moscas y ratas que de los mismos salían. De igual manera ocurría con el situado en la zona de Ayete.
La primera fase de las mejoras fue la adquisición de nuevos camiones para el traslado de la basura. La segunda fase fue la búsqueda de un emplazamiento donde establecer un nuevo basurero general, y donde posteriormente pudiera crearse la estación de transformación de basuras. Debía cumplir diferentes requisitos. Por un lado tenía que estar retirado en una zona rural con pocas construcciones cerca, que tuviera un fácil acceso por buenos caminos y que estuviera situado de una forma estratégica para que los vientos no transportaran los fuertes olores a las zonas pobladas. Finalmente se encontró un lugar desde las proximidades del monte Choritoquieta hacia el río Urumea.
(B) Vertedero San Marcos. (1971-2014) Ciclo de vida de un vertedero.
Creación 1970. La mancomunidad de San Marcos fue constituida en el año 1970 con el objetivo de solucionar la recogida y tratamiento de los residuos de los municipios de Lezo, Pasaia, Rentería y Oiartzun. Originariamente el vertedero constaba de 6 hornos incineradores y de una serie de terrenos situados en el termino municipal donostiarra en su límite con Rentería y Astigarraga en los que se procedía a los vertidos. Tras la clausura de los hornos la mayor parte de los municipios de la comarca comenzaron a verter en el mismo de forma indiscriminada.
Protestas/formación de una asociación vecinal en contra. 2006. Poco tiempo después empezaron las quejas y manifestaciones de los vecinos de Rentería, exigiendo el cierre del vertedero. Denunciaban la contaminación de la regata de Molinao, malos olores, y mala gestión…
Cierre 2013. En 2013 Se hace público el anuncio de la Mancomunidad de San marcos para la contratación de las obras correspondientes a la sub fase II del proyecto de recuperación y clausura del vertedero de San Marcos.
(C) Vertedero de Zaldibar (2007-2022)
“A las cuatro de la tarde del 6 de febrero del año 2020 un vertedero se derrumbó, invadiendo la autopista A-8 a su paso por Zaldibar, sepultando a dos de sus trabajadores”. La instalación deja sin relatar todo lo que pasó después y lo que se ha descubierto sobre el vertedero y que ha puesto de manifiesto las irregularidades en los sistemas de gestión de residuos en Euskadi.
Hace años, cuando Basurama preparaba una exposición en México DF usó esta frase de Héctor Castillo Berthier: “a través del sistema de recolección de basuras de la Ciudad de México se puede hacer una radiografía exacta de todos los sistemas políticos de la república, de sus relaciones de poder, de sus situaciones corruptas, etc.”. Una cita muy parecida encontró en el prólogo del libro Zaldibar: zona cero de Ahoztar Zelaieta, cuando investigaba sobre el accidente: «es un relato que comienza en el agujero y, a medida que escarba, van apareciendo una galería de personajes, empresas, partidos y responsables institucionales hasta componer el vivo retrato del régimen que padece esta parte del país».
Por sus basuras les conoceréis.
Trabajo en cadena
También se exponen las dos video-instalaciones de la serie Chainwork:
La video-instalación Chainwork (trabajo en cadena) muestra en un loop infinito los productos que compramos en el supermercado y los desechos en los que se acaban convirtiendo. El consumidor, fuera de plano, es la pieza clave de este mecanismo que extiende la cadena de producción hasta el vertedero; consumo y desecho como parte del mismo proceso.
Chainwork Reverted es una vídeo-instalación que, basándose en el anterior trabajo, introduce el papel de los recicladores y chatarreros (de la economía informal). El carro de supermercado se constituye como símbolo del consumo que pone en relación a compradores y recicladores: el transporte de los productos recién comprados y de los materiales rescatados de la basura. Los chatarreros, muchas veces denostados y maltratados por la sociedad, invierten el proceso lineal de consumo desecho y se convierten en verdaderos agentes contra el despilfarro y agentes contra el cambio climático (Más información sobre esta obra en ).
Documentación
La exposición contiene algunas publicacioens que se pueden descargar: