Scion

Scion es el comienzo de una investigación sobre las formas de producción de las especies vegetales con las que cohabitamos en nuestros entornos más íntimos, en nuestras casas, pero también sobre las formas de cuidado, de intercambio, de relación…que unen y nos unen a las humanas cuidadoras con nuestras plantas. Potenciar esas relaciones multiespecie que nos pasan desapercibidas podrían ser los pilares de un cambio de paradigma relacional en la ciudad.

La investigación se ha desarrollado conjuntamente con estudiantes del Departamento de Cultura Visual de la Universidad Técnica de Viena durante el seminario Plantare (PLANT + cARE) y otros ciudadanos de Viena. El resultado y los trabajos de las y los estudiantes puede verse en esta revista editada expresamente para acompañar la instalación.

Scion forma parte de la exposición colectiva Bordering Plants comisariada por Carmen Lael Hines , Roberto Majano y Adam Hudec para la Gallery of the Vienna Academy of Fine Arts y con diseño expositivo de Bilal Alame y Joanna Zabielska.

Boardering Plants considerará, a través de trabajos transdisciplinarios críticos, cómo las plantas interrogan, afirman o cuestionan las nociones de frontera. Interpretando las fronteras no como una entidad estancada, sino, citando a Brett Neilson y Sandro Mezzadra, como una ‘metodología’ y un ‘punto de vista epistémico’ para pensar sobre las ‘relaciones moldeadas’ y ‘reformuladas’, (…) de tensión y conflicto, partición y conexión, atravesamiento y barricada, vida y muerte.» La frontera se convierte así no en un hecho, sino en una perspectiva metodológica que sugiere algo binario, en varias escalas.

Todas nuestras relaciones con las plantas deberían ser relaciones simbióticas, de colaboración, pues nuestra supervivencia depende de la suya y ese vínculo, a veces invisible, es sobre el que reflexiona Scion. El proyecto es una investigación sobre las formas de producción de las especies vegetales con las que cohabitamos en nuestros entornos más íntimos, en nuestras casas, pero también sobre las formas de cuidado, de intercambio, de relación, que unen y nos unen a las humanas cuidadoras con sus plantas.

El proyecto pretende investigar y analizar los sistemas de producción de especies vegetales de interior o de venta al público, entender su modo de producción,tiempos, formas, técnicas …etc así como la posterior distribución. Comprender los sistemas de producción y consumo, hacer visible lo invisible, tomar conciencia de las implicaciones globales de los actos de consumo cotidianos. Contraponer estas plantas que generalmente provienen de grandes invernaderos. Estos lugares como fábricas productoras, espacios de replicación en cadena de seres vivos vegetales. En los invernadero actualmente no siembran sino que replican especies a partir de técnicas agrícolas como el esqueje, ello implica que prácticamente la totalidad de plantas vendidas son idénticas genéticamente (clones), y que por tanto la mayor parte de la población de un lugar concreto puede estar cuidando exactamente la misma planta. Seres humanos unidos a través del cuidado de la misma especie vegetal, vínculos invisibles de relación que el proyecto pretende visualizar para potenciar esas relaciones multiespecie que nos pasan desapercibidas pero que podrían ser los pilares de un cambio de paradigma relacional en la ciudad.

MADE IN. Exposición colectiva: Fabular un Mundo Diferente.

Fabular un mundo diferente (comisariada por Blanca de la Torre) plantea que la crisis climática nos ha situado en un punto de inflexión en que las viejas narrativas heredadas de un paradigma cartesiano nos obligan a repensar los relatos detrás de un sistema hegemónico ecocida que se ha revelado como insostenible.

Alineando la propuesta expositiva y las obras que en ella se recogen con esa tónica propositiva, donde el elemento de crítica sirva para repensar el planeta desde la ecodependencia que nos encamine a la
construcción de alternativas diferentes y, en definitiva, a un lugar mejor. Dentro de este marco Basurama propone MADE IN como ejercicio de reflexión personal pero enmarcado a escala mundial, representado por un mapa con proyección de Fuller, Dymaxion, que nos separa de la dicotomía norte-sur y nos sitúa en el imaginario de otros futuros posibles. El mapa está construido con cajas de cartón reutilizadas -con su memoria, su origen, su diseño, sus marcas-, símbolo por antonomasia del transporte a escala mundial y referente fundamental para entender el entramado del sistema de comercio mundial. El agregado de la participación de los asistentes a la exposición permitirá dibujar patrones que identifiquen los focos industriales de producción a escala mundial, así como visualizar nuestro consumo individual.

Estableceremos relaciones entre lo local y lo global, primer paso para la toma de conciencia de la interrelación de nuestros modelos sociales y los impactos ambientales.

WATER MEMORIES ITINERANT OFFICE

WATER MEMORIES ITINERANT OFFICE es una instalación de arte realizada junto con Rachel Schmidt en el marco de The Water Office, un proyecto comisariado por Blanca de la Torre que, a través de diferentes talleres busca proporcionar una plataforma para aquellas voces que actúan como «trincheras» en las «guerras del agua» que se predijeron a fines del siglo pasado. En este contexto, el arte se presenta como una herramienta eficaz para abordar el cambio climático y la crisis ambiental, y proporciona un marco para que las prácticas culturales se alineen con la Agenda 2030 y sus Objetivos de Desarrollo Sostenible.

El taller de la Water Memories Itinerant Office tuvo como objetivo mostrar cómo funciona el ciclo del agua cuando consideramos las industrias, el transporte y los residuos como parte de él. Los participantes reunieron historias sobre el agua, que se han “embotellado” en diferentes formatos, que incluyen imágenes, dibujos, textos, proyecciones y sonidos para preservarlos, compartirlos y escucharlos, y para integrarlos en un ciclo del agua cada vez más reducido. natural.

La instalación de piezas de arte final refleja el acceso desigual al agua, su calidad, escasez, sequías y disminución de los niveles de reservorios, pero también tiene el objetivo de hacernos cuestionarnos y pensar en soluciones, propuestas y formas de recuperación de los ecosistemas. La desconexión entre el concepto idealista del agua como un elemento de la naturaleza y su consumismo y sus residuos industriales resultantes.
La instalación sugiere una revisión de los ciclos de agua «naturales» en comparación con los ciclos «reales», subyacentes a la información errónea sobre el agua y la comercialización a su alrededor.

Nuestro Aporte

No hay sistema en el mundo, hoy en día, que pueda gestionar el exceso de basura que hemos producido en los últimos 20 años.

Ni en León ni en ningún otro sitio puede haber la capacidad de gestionar, limpiar, separar, procesar, tratar y transportar toda la basura que se genera. Estos verbos se vienen asociando a la industria del reciclaje como eufemismos, sueños o proyectos de una empresa humana prácticamente inalcanzable: deshacerse de los milllones de objetos que se desechan cada día: no es un problema técnico o ambiental: la basura es la hermana del consumo, y el consumo es el signo de nuestros tiempos, nuestra identidad histórica.
La basura, en su amplísima mayoría, se sigue enterrando hoy en día, aunque los sistemas de reciclaje han sido implantados en muchísimos lugares (destruyendo por el camino los sistemas de reducción y reutilización que prioriza la regla de las 3 R, y renombrando algunos vertederos como “zonas ecológicas”). Sin embargo, antes de que se lograra reciclar el 15-20% de las basuras que se desechan (de media en el Estado español), se fueron depositando en las décadas previas miles de toneladas de basuras que ya han pasado a formar parte del suelo que pisamos.
En León, en las dos últimas décadas, parece que la basura ha insistido en emerger, en no dejarse enterrar.

Durante meses, Basurama investigó el territorio de León y el universo de su gestión de basuras.
El de León es un territorio paradigmático de la mala gestión de residuos: por su estructura de muchos núcleos de población dispersos, las basuras circulan por una región de un gran tamaño, por donde se han ido distribuyendo los residuos a lo largo de las décadas.

La empresa pública de gestión ha venido vinculada a la muy polémica diputación, y también ha tenido varios casos recientes de mala gestión, además del llamativo caso de un peregrino que apareció muerto en el vertedero.

Escombreras ilegales convertidas por arte del “greenwashing” en zonas ecológicas, basuras mal enterradas que emergen a la superficie, vertidos de basuras que terminan en ríos, etc.

Fuimos recopilando recursos por toda la región, desde escombreras lejanas hasta el plástico que produce constantemente el propio museo, y los apilamos en la instalación.

Agostamiento. Abierto x Obras.

Basurama propone un paisaje interior para Abierto por Obras, extraído de la plantación de 7000 girasoles que ha cultivado durante el verano 2016 en la Gran Vía del Sureste, junto con los vecinos del Ensanche de Vallecas, en el límite sureste de Madrid. Un espacio público imposible que invita a charlar y a comer pipas, mirando hacia el futuro desde lo más oscuro.

El «bulevar central» abandonado de esta avenida -en realidad un descampado de 350 metros de largo y 30 de ancho-, es uno de los muchos restos que la explosión de la burbuja inmobiliaria dejó en nuestra ciudad. Un paisaje urbano desolador e inquietante, que se propone y se reinventa como paisaje agrícola, para convertirse en un espacio productivo y de encuentro.

Entre esos restos de ciudad nueva, viven personas que han decidido hacerse cargo de sus vidas y de sus barrios, gestionando sus espacios públicos. En tiempo de agostamiento, el ciclo de vida e inflorescencia abre un espacio de vida por construir y compartir.

Fotos del proceso

Vídeo sobre la plantación de los girasoles:

https://vimeo.com/188002237

Para saber un poco más:

Y un poco más aún

ABUNDANCIA

Nunca antes a existido tanta abundancia.

Decía José Luis Pardo en su charla Nunca fue tan hermosa la basura:

“El Libro Primero de El Capital, de Marx, comienza diciendo: «La riqueza de las sociedades en las que domina el modo de producción capitalista se presenta como «una inmensa acumulación de mercancías»». Nosotros tendríamos que decir, hoy, que la riqueza de las sociedades en las que domina el modo de producción capitalista se presenta como una inmensa acumulación de basuras. En efecto, ninguna otra forma de sociedad anterior o exterior a la moderna ha producido basuras en una cantidad, calidad y velocidad comparables a las de las nuestras”.

 

Nunca antes ha existido tanta abundancia. La abundancia es considerada la prosperidad de nuestros tiempos. Es tanta que ya se ha vuelto invisible en el paisaje. Por su condición de deseable y reproducible (sistemas de producción), la abundancia puede ser infinita. Siempre hay más. En las sociedades capitalistas la abundancia se mide en basura. Y si hay algo inherente a nuestra sociedad es el consumo, cuya imagen más evidente, aunque invisible e invisibilizada, es el cartón: la caja que alguna vez albergó todos o casi todos los bienes.

Cuando uno pasea por la ciudad, a nuestros pies se van acumulando, sin percibirlo, las cajas que transportaban todo aquello que hemos consumido, admirado, comprado a lo largo del día. Habitar la abundancia es una instalación artística site specific que comienza cubriendo la fachada de la galería y que la va colonizando. La obra nos recibe y nos invita a introducirnos en la misma a través del camino que marca, propagándose a su interior, invadiéndolo, pero al mismo tiempo haciéndolo habitable, convirtiéndolo en un espacio acogedor pero cavernoso y extraño. Empleando los cartones recuperados junto con recolectores informales de las calles comerciales del centro de Madrid, nos sumerge y nos sepulta en la acumulación, con el objetivo de sentir la abundancia, de experimentar su exceso, su desborde, su inmensidad.

Desde dentro de la instalación se pueden descubrir algunas imágenes fruto de los proyectos que Basurama ha realizado a lo largo de su trayectoria con recolectores informales. Los clasificadores son una parte fundamental en los mecanismos de recuperación de valor de los residuos y habitualmente son minusvalorados por la sociedad. Han sido una pieza clave en muchas de las obras de arte público y colaborativo de Basurama y son los auténticos expertos en la gestión de los desastres que la abundancia genera en sus ciudades. Las fotografías muestran los lugares y las herramientas de trabajo de estos recicladores de la economía informal. Para Abundancia se han seleccionado las piezas “Los buzos del vertedero de La Duquesa” en Santo Domingo, República Dominicana; ”Carro de un tamborero» en la Ciudad de México; la «Mina de cartón» de El Cairo, Egipto, donde los Zabbaleen procesan miles de toneladas de cartón; y una de las fotos del tríptico “A lomo de caballo criollo se hizo la patria” de Montevideo, Uruguay.

También se pueden contemplar dos piezas de vídeo, “Chainwork reverted”, proyecto desarrollado con el apoyo de Fundación Bilbao Arte, y “Bodegones de abundancia”. En la primera se toma el carro de supermercado como símbolo del consumo que pone en relación a compradores y recicladores, el transporte de los productos recién comprados y de los materiales rescatados de la basura. En la segunda se muestran esos bodegones cotidianos presentes en las calles de cualquier ciudad a última hora de tarde, antes de que se ponga el sol, cuando emerge la abundancia, cuando se hace visible aunque siga invisibilizada. Para terminar, la serie fotográfica Poemas invisibles, es un paisaje de 30 fotografías que investigan los significados ocultos que dejan prendidos al cartón las miles de manos que lo trabajan, lo transportan, lo escriben, lo portan, lo leen. Son fotografías de cajas recogidas del suelo de varias ciudades del mundo en los últimos meses. Proponen nuevas lecturas posibles latentes en las cajas, trazadas por la memoria que ha ido dejando huella a través de sus cortas vidas (y largos viajes). Acercándose a ellas, encontrando abstracciones plásticas que recuerdan, o pueden recordar obras de otros artistas contemporáneos.

La basura es abundancia. La abundancia es consumo. Morimos en la abundancia.

 

La exposición se inauguró el 28 de mayo de 2016 en la Galería Moisés Pérez-Albéniz y permaneció abierta hasta el 23 de julio de 2016.

Living as a Form

Living as a Form ofrece una mirada diversa sobre una amplia gama de prácticas que pueden ser calificadas como socialmente comprometidas. Estas prácticas, que aparecen cada vez con mayor regularidad,  van desde el teatro al activismo,  la planificación urbana o el arte visual. El proyecto reúne a veinticinco comisarios, documentos de más de 100 proyectos de artistas en una exposición encuesta a gran escala dentro del histórico edificio de Essex Street Market, cuenta con nueve nuevas comisiones en el barrio que la rodea, y proporciona un archivo en línea dinámica de más de 350 comprometidos socialmente proyectos.

Basurama participó con Residuos Urbanos Sólidos (RUS) en los siguientes espacios:

  • El Centro de Arte y de Investigación de la Sociedad, Tokio, Japón, 15 noviembre 2014 a 28 noviembre 2014
  • Technion / Instituto Tecnológico de Israel, Haifa, Israel, mayo 28 a junio 28, 2014
  • Museo de Arte de Sinaloa, Sinaloa, México, noviembre 14, 2013 hasta febrero 13, 2014
  • El cuarto proyecto Anyang Arte Público, Ayang, Corea del Sur, 26 octubre 2013 a 15 mayo 2014
  • McDonough Museum of Art, de Youngstown, Ohio, 7 septiembre a 9 noviembre, 2012
  • Fundación Kadist Art, San Francisco, California, abril 17 hasta noviembre 9, 2012
  • Videotage, Hong Kong, 1 marzo-10 mayo 2012
  • Essex street market, New York, del 24 septiembre al 16 de octubre,2011.

 

Nato Thompson es el comisario de la exposición. Podeis leer el texto curadorial aquí o ver la presentación

https://vimeo.com/27289754

 

TrashLation

TrashLation es un proyecto de producción artística en colaboración con programa ART­EX de la AECID que investiga y reflexiona en torno al consumo-identidad y el desecho.

El objetivo es hacer una visualización a nivel mundial de la basura que cada uno de nosotros produce independientemente de nuestro estrato social, nuestro país de origen o nuestra edad. Hacer visible como lo local y lo global están íntimamente relacionados,  generar narraciones de consumo y desecho, ser voyeurs de los otros a través de lo que siempre se oculta, su basura.

 

A día de hoy se han sumado a Trashlation los siguientes países: Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, España, Filipinas, Hungría, India, Japón, Marruecos, México, Noruega, Sudáfrica y Suecia.

La investigación sobre nuestra identidad-consumo nos plantea evidencias y nos hace caer en tópicos y generalidades, pero también nos sorprende con algunas concordancias sorprendentes. Trashlation, pretende rastrear conceptos y acepciones que relacionan consumo y necesidad, consumo y deseo, consumo como memoria, ciudadanos por la vía del consumo, diferenciar entre consumo y consumismo alejándose de la encuesta y la sociología, husmeando en el imaginario colectivo global del consumo y la intimidad de la basura de cada persona que ha querido participar en el proyecto.

 

Este proyecto no trata de comparar el consumo excesivo pero aceptable de occidente con el consumo creciente y grotesco de los países del sur, sino que desea dialogar sobre cómo cada uno se ha zambullido en su basura inorgánica y ha elegido lo que a su juicio mejor lo representa. Su forma de vida, su capacidad adquisitiva, su “gusto” como distinción social, sus caprichos, secretos o vicios. La realidad es que existe un filtro en todas las personas para elegir, no aquello que realmente las define como lo que son, sin tapujos, sino con lo que quieren que se les asocie. Eligiendo su basura, hacen un autorretrato de su identidad-consumo, enseñamos nuestra cara-b, más pública y a la vez más íntima que ninguna, lo que tiramos a la basura, seguramente la parte más secreta de nuestra cocina, y la que compramos en el (super)mercado, uno de los últimos lugares de encuentro y vida cívica.

En esa tensión se sitúa Trashlation, generando más que una gráfica, un paisaje de nuestras vidas hoy en día.

Si quieres participar en el proyecto, envíanos tu retrato y una foto de tu basura de las últimas 24 horas siguiendo estas instrucciones.

 

EXPOSICIONES

Se puede consultar el catálogo del proyecto; con texto curatorial de Fernando Castro.

// Junio-Julio 2016. La Salle-College of Saint Benilde. Manila, Filipinas.

// Febrero-Marzo 2016. Centro Centro. Madrid, España.

// Septiembre-Octubre de 2015. Universidad  Melbourne, Australia.

La exposición se estructuró en 3 partes:

 

Aprendiendo de las Cuencas

Ver más fotos.

El proyecto de investigación Aprendiendo de las Cuencas tuvo como objetivo ofrecer una nueva mirada del paisaje cultural de las Cuencas Mineras Centrales de Asturias. Tanto el proyecto como la exposición fueron comisariados por Nacho Ruiz Allén y Sara López Arraiza. Estuvo expuesta en Laboral Centro de Arte entre septiembre de 2013 y febrero de 2014. Se situó en correspondencia con algunos de los manifiestos arquitectónicos más importantes de las últimas décadas, surgidos como resultado de afortunados análisis vertidos sobre lugares antaño menospreciados. Las interpretaciones que Reyner Banham, Robert Venturi y Denise Scott Brown, Rem Koolhaas y el Atelier Bow-Wow realizaron sobre Los Ángeles, Las Vegas, Nueva York y Tokio, respectivamente, constituyen referentes indispensables para su desarrollo.

Artistas participantes: Óscar de Ávila, Basurama, Edu Comelles, Cómo crear historias, Antonio Corral Fernández, Bárbara Fluxá, Marcos Martínez Merino, Fran Meana, Mind Revolution, OSS Office for Strategic Spaces, Recetas Urbanas, Daniel Romero


Desde Basurama planteamos una segunda capa de percepción a través del diseño e instalación de señales de tráfico.

Las señales de tráfico indican cosas que en un principio no están tan claras: hacen visibles tanto posibles peligros como líneas de actuación o inlcuso recursos. Avisan de elementos que nos podemos encontrar en el camino y recomiendan que nos coportemos de una manera o de otra. Sirven tanto para recordárselo al oriundo (que a fuerza de recorrer lo andado tiende a confiarse) como al recién llegado (que desconoce el entorno que pisa).

Pero estas señales son producidas desde un organismo central que, a través de un protocolo general, aplica esta acupuntura pisajística en áreas locales.

¿Sería posible ampliar y profundizar este protocolo, singularizarlo y gestionarlo entre los diferentes actores que pueblan un paisaje?
O incluso ¿sería posible diseñar, fabricar y geolocalizar nuestras propias señales para mostrar al mundo un relato subjetivo?

Este proyecto es un prototipo incipiente, en lugar de trabajar directamente con una comunidad, los diseños han sido pre-definidos por unos artistas. Estos diseños quedan a disposición de diferentes agentes con la intención de testear sus reacciones.

Arriba puedes ver un gif animado con todas las señales que barajamos, y las cinco que produjimos.

Aquí debajo las fotos de Laboral/ Paula A.C. de las intervenciones con ellas.




Un Dilema

Entre el 19 de novimbre de 2013 y el 12 de enero de 2014 se expueso en el Centre d’Arta Santa Monica (CASM) de Barcelona la exposición ‘Un dilema. L’art contemporani i la inversió en la incertesa’- Un Dilema. El arte contemporáneo y la inversión en la incertidumbre.

Comisariada por Jeffrey Swartz,  es una exposició comissariada per Jeffrey Swartz que se ha organizado con la voluntad de visualizar la tarea que llevan a cabo los centros de la Xarxa de Centres i Espais d’Arts Visuals de Catalunya , la cual está formada por Lo Pati, Centre d’Art de les Terres de l’Ebre; Fabra i Coats de Barcelona;  Bòlit, Centre d’Art Contemporani de Girona; Tecla Sala de l’Hospitalet, el Centre d’Art La Panera de Lleida, el MAC de Mataró, el centre d’Art de Tarragona y la ACVIC de Vic.

El título ‘Un dilema . L’art contemporani i la Inversió en la incertesa ‘ , está inspirado en las ideas del economista sueco Gunnar Myrdal sobre el sentido económico del riesgo y la incertidumbre. Los trabajos que se muestran en ofrecen obras que ejemplifican las diversas corrientes creativas actuales a partir de artistas que han pasado en los últimos años por los centros de la Xarxa d’Arts Visuals de Catalunya.

Basurama estuvo presente por partida doble: con los talleres de neumáticos que hemos hecho en La Panera y con la versión para exposición de la obra que produjimos este verano de 2013 en la residencia de artistas Baladre, de Lo Pati, junto con Eva García Pérez; «25 experimentos emocionales para testear la respuesta del paisaje a propuestas de ocio menos consumistas», cuya versión web podéis ver en: http://ociomenosconsumista.tumblr.com/

Los artistas participantes son:
Francesc AbadBasuramaRo CaminalCurro Claret con Arrels Fundació, Raimond Chaves & Gilda Mantilla, DemocraciaRaquel Friera, Ana Garcia-Pineda, Martí GuixéNúria Güell con Juanjo Garfia,Les Salonnières, Antoni Llena, Antoni MarquèsJosep-Maria MartinMariona MoncunillSofia Mataix & Miquel OlléAntonio OrtegaGabriel PericàsTere Recarens & Özay Sahin, Francesc RuizMireia Sallarès y Ivó Vinuesa, entre los que se encuentran algunos muy admirados por nosotros. Ya sabéis cuáles son 😛

 

La exposición suscitó en su día mucho debate y crítica en el panorama local.
A esa crítica contribuimos con un texto para el catálogo que nunca termina de llegar, que puedes leer aquí:

Nos preguntamos… ¿Qué será un centro de producción de arte?

Un día nos llaman para invitarnos a participar en una exposición en Amposta, Tarragona. Una buena muestra, un centro desconocido para nosotros, pero seguro interesante… una gran alegría.

Además, nos proponen hacer una estancia en su residencia para artistas, casi como una forma de completar el pago por la participación en la muestra. Eramos algunos de los pocos artistas de la muestra -comisariada perdiendo dinero por Albert Mtnez. López-Amor- cuya obra no estaba en las colecciones de los centros catalanes que, asociados en sus varias redes, cederían gratis sus piezas a la exposición.

Atención, obras icónicas para la historiografía del arte catalán, desde Joaquim Vayredá a Fontcuberta, cedidas -con su gestión, su transporte, sus seguros, etc.- a un centro de arte situado en una ciudad de 18,000 habitantes, en el más remoto sur catalán.

Un centro de arte que consiste en una sala de menos de 200 m2, adjunta a un museo típicamente «provincial», con un leve equipamiento museográfico -proyectores, luces, plintos y mesas-, y una plantilla reducida al mínimo: un director y una becaria. Un director que ganó su concurso público a cambio de contratos renovables anualmente, un sueldo ridículo y unas condiciones que no le permiten más que dedicarle media jornada. Un director que tiene que hacer de transportista, montador y gestor.

La residencia para artistas «Baladre», está localizado en Balada, un núcleo habitado por un número variable entre 4 y 12 personas, partido al medio por la frontera entre Amposta y Sant Jaume d’Enveja, rodeado de arrozales hasta donde alcanza la vista. El edificio alguna vez iba a estar dedicada a un centro de producción de alfarería, consta de un baño, una sala donde dormir con cocina y nevera incluida (con un imprescindible aire acondicionado), un patio y otra estancia enorme, de techos altos, que no tiene más equipamiento que el lujo del espacio. Eso y la fantástica cocina del director del centro de arte, si tienes suerte. Sin embargo, este centro está ocupado muchas semanas al año. Sin duda el entorno resulta seductor, y probablemente es el mayor valor añadido que le aporta al creador. Nosotros recibimos 1000 euros por ceder 5 fotos enormes, transportarnos y vivir en la residencia dos personas durante una semana, y producir una obra licenciada en creative commons que consta de 25 vídeos, que ya ha sido expuesta en dos ocasiones. El equipo y el montaje de vídeo corren de nuestra parte, por supuesto. Además, de aquella residencia surgió el re-estreno en Madrid, en el Campo de Cebada de la peli «Se Fa Saber», documental sobre la vida en aquella región.

¿Así las cosas, podría alguien decirme por dónde se podría recortar? Como acabamos de relatar, con la precariedad total lográbamos producir situaciones interesantes, y de una rentabilidad astronómica, así que suponemos que el único objetivo de los recortes es dejarnos bajo cero, allá donde ya no podamos existir, ni en Cataluña ni en ningún sitio.

Eso es una certeza.

No hay inversión en incertidumbre, hay inversión en certeza: «se acabó lo que se daba»